Ámame cuando menos me lo merezca, porqué será cuando más lo necesite. El amor es una hermosa flor que nace al borde de un abismo. Tómate tiempo en buscar un amigo, pero sé más lento aún en cambiarlo. Aquel que tiene un porqué para vivir puede enfrentar todos los comos. Lo más difícil de aprender en la vida es qué puente hay que cruzar y qué puente hay que quemar. Lo que hagas en la vida, tendrá eco en la eternidad. La vida es una constante búsqueda de felicidad. La lógica es buena para razonar, pero mala para convivir. Cada salida es una entrada a otro lugar. No ha vivido más el que cuenta más años, si no el que ha sentido mejor un ideal. La vida vale por el uso que de ella hacemos, por las obras que realizamos. Todo el mundo aspira a la vida dichosa, pero nadie sabe en qué consiste. Lloramos al nacer porque venimos a este inmenso escenario de dementes. Un hombre con ideas es fuerte, pero un hombre con ideales es invencible. El hombre no deja de existir cuando muere, sino cuando deja de amar. Ríe cuando estés triste, llorar es demasiado fácil. El dinero no da la felicidad, pero ayuda a superar el complejo de su ausencia. Un beso es algo demasiado profundo como para poder explicarlo con palabras. Ofrecer amistad a quien pide amor es como dar pan a quien muere de sed. La muerte juntó sus labios con los míos y sentí miedo, y por el miedo sentí frío, pero al mismo tiempo sentí el calor de las llamaradas del infierno recorriendo cada rincón de mi asustado cuerpo. No sueñes tu vida. Vive tu sueño. Un amigo es aquel que conoce todos tus defectos y a pesar de ello te quiere.